Pim, pam, pum (Gran Premio de Gran Bretaña 2013)


Camino de la tercera posición, rezando para que no reventasen las ruedas.

Pintaba mal para Ferrari. Massa no pudo entrar en la Q3 y Alonso quedó décimo en la parrilla de salida. El coche no tira, dijeron. Se las prometían muy felices en Silverstone, pero iban frustrándose las esperanzas una tras otra.

La carrera ha acabado mucho mejor de lo que esperaban. Massa ha acabado sexto y Alonso, tercero. Lo mejor ha sido el abandono de Vettel, por rotura en la caja de cambios, que animará el campeonato de pilotos. Ha ganado Rosberg, con un Mercedes, y Webber ha sido segundo, después de un carrerón. Dicho así, parece que ha sido una carrera emocionante. ¡Vaya si lo ha sido!

¡Pam! ¡Otro! Pese al reventón, Hamilton ha acabado cuarto.

El safety car ha salido dos veces a pista y la carrera se ha decidido en las últimas cinco vueltas, frenéticas. Entre medio, los neumáticos Pirelli iban estallando, pim, pam, pum. Los reventones has sido los protagonistas y no se ha librado nadie, ni el apuntador. Cinco reventones, un par de pinchazos... Los ingenieros fruncían el ceño: ¡Esto no es normal!
 

Don't Worry, Be Sad!


Los optimistas niegan la realidad y además son idiotas.

En cristiano, el título dice ¡No te preocupes! ¡Sigue con tu mala leche!

Se ha publicado hace poco, en la revista de la Association for Psychological Science (que se llama, cómo no, Psychological Science) un artículo de Joseph P. Forgas (jp.forgas@unsw.edu.au), un profesor de la Escuela de Psicología de la Universidad de Nueva Gales del Sur, en Sidney, Australia. El artículo se titula Don’t Worry, Be Sad! On the Cognitive, Motivational, and Interpersonal Benefits of Negative Mood, algo así como ¡No te preocupes! ¡Sigue con tu mala leche! Sobre los beneficios cognitivos, motivacionales e interpersonales del mal humor.

Ya saben que los psicólogos hablan raro para darse importancia, pero lo que señala el profesor Forgas merece nuestra atención, porque insinúa que somos más listos, nos empeñamos más en hacer lo que hay que hacer y nos relacionamos mejor con los demás cuando vemos el mundo con malos ojos que cuando vamos de buenas. A fin de cuentas, estar de buen o mal humor es una reacción del ser humano a los estímulos del entorno que se ha ido formando a lo largo de muchos años de evolución. Imagínense un cavernícola feliz y positivo acosado por un oso hambriento; apostaría a que el oso deja de pasar hambre.

Según Forgas, un experto en el estudio de la relación entre la capacidad cognitiva y los sentimientos, afectos y emociones del ser humano, existe una sólida base experimental que demuestra, atención:

La desafección y el mal humor mejoran nuestra memoria, porque atendemos mejor a los detalles.

La mala leche reduce los errores en los juicios de valor, porque no nos dejamos deslumbrar por la primera impresión y analizamos la situación más fríamente, sin entusiasmo. Es decir, durante los días que nos descubren víctimas del pesimismo somos más rigurosos, menos ingenuos y no nos dejamos convencer fácilmente por los estereotipos.

Bajo ciertas circunstancias, el mal humor, el pesimismo o una visión negativa del mundo en general y de la mierda que me ha tocado en particular es un factor de éxito en la motivación personal y en nuestra relación con los demás. Por lo que dice el profesor Forgas, el pesimista tiende a acomodarse mejor a las circunstancias, no tiene prejuicios a la hora de valorar el entorno, soporta mejor el fracaso y la frustración, afronta los problemas con equidad y, curiosamente, se relaciona mejor con las demás personas porque es más precavido y educado al no esperar nada bueno de ninguna de ellas. En resumen, el pesimista examina y analiza mejor su entorno y prescinde de su autoestima y autocomplacencia, porque no está de humor para eso.

En cambio, un optimista siempre mira para sí, dice que todo es muy bonito y en medio de la borrachera de felicidad parece que trata a los demás como si fueran amigos de toda la vida y cuando aparece el oso hambriento, ése que decíamos, lo saluda afectuosamente y le propone discutir el tema. Naturalmente, acaba haciendo las veces de merienda y todos lo recordarán como el gilipollas que inventó el abrazo del oso.

Es bueno que alguien cuestione de vez en cuando la bondad de tantas bondades. La beatería y el panfilismo, el buen rollo, el jipijapi, son buenos de vez en cuando, pero no como norma y no hace falta ser un profesor universitario de Nueva Gales del Sur para ver que los optimistas son, las más de las veces, un peligro público.

El adversario



Emmanuel Carrère escribió L'Adversaire en 1999 y lo vio publicado en 2000. Jaime Zulaika lo tradujo para Anagrama ese mismo año y se publicó en español. He leído la versión para la colección Compactos de Anagrama (algo así como su edición de bolsillo) publicada en 2013.

El adversario sigue la línea de A sangre fría de Truman Capote al narrar un crimen que sucedió realmente. Un personaje llamado Jean-Claude Romand mata a sus padres y luego a su mujer y a sus niños, en 1993. Luego intenta quitarse la vida y fracasa en el intento. A poco que investigan el caso, los policías descubren que la vida de Romand ha sido toda ella una gran mentira, una apoteosis de falsedades que se han sucedido una tras otra hasta provocar la tragedia, que se presenta inevitable.

Carrère, ensayista y guionista de cine, se enfrentó a la historia del asesino buscando el origen del mal, ése que dicen que habita en todos nosotros. Pero Romand era un personaje tan banal... Cuentan que Carrère se angustió y deprimió hasta tal punto después de entrevistarse con Romand y plantearse el caso que tuvo problemas psicológicos relativamente serios y se negó a publicar lo escrito durante mucho tiempo.

Salto de lo que me cuentan a un punto de vista estrictamente personal. Desconocía la obra y no he visto las películas (una francesa y otra española) que se han inspirado en esta historia. No me sonaba Carrère y he leído El adversario con curiosidad, pero sin grandes expectativas.

La historia es espeluznante, es cierto, pero al principio, aunque interesante, me dejó frío. En la parte del medio comenzó a alargarse demasiado hasta que, de repente y sin previo aviso, comenzó a despertar mi interés, a medida que se aproximaba la tragedia, el crimen múltiple y horrendo. Una vez cometido el crimen, el interés comienza a disminuir y hacia el final ha desaparecido completamente.

He leído críticas muy buenas del libro y sus lectores se muestran todos a la vez horrorizados y fascinados, decididamente impresionados. Ponen notas altísimas al libro, un no da más. Pero yo no puedo sumarme a esta corriente. Reconozco que el relato se lee bien y deja cierto regusto amargo, como la tónica que se toma un poco caliente. Pero, como esa tónica, creo que podría haberse servido mejor, con algo más de hielo y limón.

Un recorte, unas subvenciones y una corruptela



Recorte previsto este año para los hospitales públicos catalanes: 105 millones de euros. Un 7% de su presupuesto.

Quedan afectadas por el recorte: 8 hospitales públicos catalanes, 200.000 intervenciones quirúrgicas y 55.400 pacientes en lista de espera, 1.200.000 ingresos hospitalarios y más de 2.500.000 tratamientos y diagnósticos




Entidades presentes en el Pacto Nacional por el Derecho a Decidir, excluyendo partidos políticos y entes públicos como ayuntamientos, diputaciones, etc.: 34 (aprox.)

Número de afiliados de los partidos, sindicatos y entidades presentes: No existe un registro fiable de afiliados que paguen cuota. Se calcula que UGT y CC.OO. tendrán unos 200.000 afiliados, más unos 80.000 de los partidos políticos presentes. El resto de entidades cuentan con unos 50.000 socios en total.

En noviembre de 2012, los partidos políticos presentes reunieron 2.100.000 votos (aprox.), el 38,7% del censo electoral.

Total de subvenciones que ha otorgado el Gobierno de la Generalidad de Cataluña este último año a las entidades presentes en la reunión: Más de 200 millones de euros, entes públicos y partidos políticos, aparte.



Directores de CatSalut: Uno, Josep Maria Padrosa.

Cargos del señor Padrosa: Director de CatSalut (sanidad concertada en Cataluña). Apoderado de seis empresas del sector sanitario. Según la ley, una cosa y la otra son incompatibles.

Contratos de las empresas del señor Padrosa: El ente público que dirige el señor Padrosa ha pagado a las empresas del señor Padrosa entre 14 y 16 millones de euros desde que gobierna CiU. Hace poco ha firmado el ente público que dirige el señor Padrosa ha firmado contratos para los próximos diez años por valor de 160 millones de euros con las empresas del señor Padrosa. Mediante una cláusula de la licitación, esos 160 millones de euros podrían convertirse en más de 240 millones.

Personas afectadas: El 97% de los usuarios de la sanidad pública en Cataluña.


La batalla de Ponte Grande


El sur de Siracusa y los alrededores del Ponte Grande, en 1943.

El desembarco y ocupación de Sicilia en 1943 fue la primera gran operación combinada aliada de la Segunda Guerra Mundial. Fue la primera batalla donde los aliados emplearon paracaidistas y tropas aerotransportadas a gran escala, y casi la última.

Sin entrar a discutir otros asaltos aerotransportados en Sicilia, nos fijaremos en la operación Ladbroke, que pretendía asegurar un puente de carretera al sur de Siracusa, el Ponte Grande, y tomar al asalto otras posiciones y baterías costeras de la Regia Marina, las que defendían el puerto y las playas de los alrededores. Esa operación se llevaría a cabo pocas horas antes del desembarco del 8.º Ejército británico. El asalto lo realizaría la 1.ª Brigada Aerotransportada (británica).

Planeador Hadrian, en primer plano, y C-47 Dakotas en el fondo. (1942).

Se diseñó el ataque con planeadores: 135 Hadrian (Waco CG-4A) norteamericanos, capaces de llevar 15 soldados a bordo, y nueve Horsa (británicos), que podían llevar 30 soldados o equipo pesado. Los remolcarían los Dakota (Douglas C-47) de la 51.ª Ala de Transporte norteamericana y los Albermale del 296.º Escuadrón y los cuatrimotores Halifax del 295.º Escuadrón.

Para evitar el fuego antiaéreo amigo, el plan de vuelo evitaría los convoyes de invasión. El plan de vuelo incluía tres cambios de rumbo en plena noche que presagiaban problemas de orientación.

Paracaidistas británicos a bordo de un Hadrian, rumbo a Sicilia.

Peor todavía. Los pilotos de los Dakota americanos nunca habían remolcado planeadores de ninguna clase. Los pilotos paracaidistas británicos no conocían los planeadores Hadrian y apenas habían tenido tiempo de entrenarse en su manejo a plena luz del día. Pese a las quejas de algunos oficiales, la operación Ladbroke siguió adelante.

A las seis de la tarde del 9 de julio de 1943, partió la 1.ª Brigada Aerotransportada hacia su destino. En total, 2.075 hombres, siete jeeps, seis cañones anticarro y diez morteros. Se había previsto que los planeadores aterrizaran prácticamente encima del Ponte Grande y las baterías enemigas.

Un Halifax remolcando un Horsa, en julio de 1943.
Observen la cantidad de polvo que levantan los remolcadores.

La cosa se torció desde el principio. Los aviones remolcadores levantaban tal cantidad de polvo en los aeródromos de Túnez que desaparecían de la vista de los planeadores y resultaba imposible saber cuándo despegaban. Ocho planeadores se perdieron por culpa de accidentes en el despegue.

Luego pillaron mal tiempo, vientos contrarios superiores a veinte millas por hora, hasta fuego antiaéreo. Para evitar los cañonazos del enemigo, los remolcadores volaron más alto y realizaron maniobras evasivas y no pocos se desorientaron. Luego, llegada la hora, soltaron los planeadores y regresaron a casa.

Muchos planeadores se perdieron en el mar.

Según los informes de los pilotos, un 90% de los planeadores habían aterrizado en el lugar previsto. Pero la realidad fue otra, muy diferente. Sesenta y cinco fueron a parar al mar, lejos de tierra firme. Cincuenta y nueve aterrizaron en cualquier parte en un radio de 40 km de sus objetivos. Sólo doce aterrizaron más o menos donde debían haber aterrizado.

De hecho, sólo un Horsa aterrizó cerca del Ponte Grande, el número 133, poco antes de las diez y media de la noche. Llevaba a bordo una sección del 2.º Batallón del Regimiento South Staffordshire (los Staffords) a las órdenes del teniente Withers y unos zapadores al mando del teniente Eric O'Callaghan, de la 9.ª Compañía Aerotransportada de Ingenieros Reales, zapadores paracaidistas.

Ésta podría haber sido la tropa del teniente Withers. Apenas un puñado de hombres.

Qué papeleta la del teniente Withers, tomar al asalto un puente tan grande como ése con un puñado de hombres. Dividió a sus hombres en dos grupos. Uno lo envió al extremo sur del puente y él y cinco hombres más formaron el segundo grupo, que cruzó el río a nado (sic) y se plantó en el lado norte. Entonces, atacaron con granadas de mano.

Los defensores eran soldados italianos del 120.º Regimiento de Infantería (Costera), una unidad de segunda fila, que se llevaron un buen susto y abandonaron los blocaos del lado norte, pies para qué os quiero. Los paracaidistas hicieron un puñado de prisioneros, que encerraron en un blocao.

Una o dos horas después, se presentó un camión cargado de soldados italianos. Fue emboscado por los paracaidistas, ametrallado y la docena de italianos que iban a bordo murieron todos.

El lugar de la batalla, Ponte Grande, hoy.

Los primeros refuerzos en llegar fueron el teniente Welch y siete paracaidistas, a las cuatro y media de la madrugada. A las cinco, llegaron quince zapadores paracaidistas. A las cinco y media, media docena más... Los paracaidistas, dispersos aquí y allá, tuvieron que apañárselas como pudieron para llegar a su destino en medio de la negra noche. A las seis y media de la mañana, no más de 87 hombres defendían el Ponte Grande.

Este Hadrian aterrizó encima de una tomatera.

A las siete, se presentó otro camión italiano que también fue recibido a tiros. Se retiró. A las ocho, los italianos comenzaron a tirar granadas de mortero contra los paracaidistas. Una de las granadas entró por la escotilla de uno de los blocaos del lado norte del puente y estalló matando a todos los prisioneros de guerra italianos.

Al parecer, se enfrentaban a dos compañías de marineros italianos. Los paracaidistas aguantaron el chaparrón con paciencia. Esperaban refuerzos procedentes de las playas hacia las diez de la mañana. Pero los refuerzos que llegaron primero fueron los italianos. A las once y media, tenían enfrente al 385.º Batallón de Costa y al 1.º del 75.º Regimiento de Infantería (Napoli). Estas tropas enemigas trajeron consigo piezas de artillería.

Uno de los blocaos del Ponte Grande, hoy en día.

A las doce y veinte, los italianos intentaron un asalto. No fueron más allá de la intención, pero las granadas enemigas comenzaban a hacer mella en las defensas de los paracaidistas. A la una menos cuarto, se retiraron a posiciones que podían defender mejor, al este y sur del puente.

Cubiertos por el fuego de mortero y ametralladora, los italianos avanzaron lentamente, sin prisas. A las tres menos cuarto, todos menos 15 paracaidistas habían caído muertos o heridos. A las tres y media, los paracaidistas habían agotado la munición. El teniente Welch (herido) y siete hombres más, que defendían una posición al sur del puente, lograron echarse al monte, esconderse en la vecindad y escapar de los italianos, pero el resto fue hecho prisionero.

Los sumaron a una columna de prisioneros que marchaba hacia Siracusa (muchos, paracaidistas como ellos, capturados aquí y allá). Noventa minutos más tarde, los captores se convirtieron en capturados porque tropezaron con la 15.ª Brigada de Infantería británica, recién desembarcada y se rindieron. Los paracaidistas tomaron las armas a los italianos y corrieron hacia el puente, para volverlo a tomar al asalto.

Los restos del Ponte Grande, hoy en día.

Mientras tanto, a las cinco menos cuarto, el teniente Welch y sus siete hombres habían tropezado con soldados escoceses de una avanzadilla de la 17.ª Brigada de Infantería. Quince minutos más tarde, guiados por el teniente Welch (que seguía herido), los paracaidistas y los escoceses tomaron el puente al asalto y por sorpresa, de nuevo. Como los paracaidistas habían retirado o inutilizado las cargas de demolición, los recién llegados pudieron asaltar y cruzar el puente, batir a los italianos en retirada y resolver el negocio deprisa y sin problemas. Poco después, llegaron los paracaidistas que habían sido presos y luego liberados y reforzaron la posición.

Así acabó la batalla del Ponte Grande.

El 13 de julio, los supervivientes de la 1.ª Brigada Aerotransportada se retiraron del frente y se reunieron en Túnez. Uno de cada tres hombres de la brigada había muerto o había sido herido. La mitad de las bajas habían muerto ahogadas en alta mar y se habían dado por desaparecidas.

Los tenientes Welch, Withers y O'Callaghan fueron condecorados con la Cruz Militar (MC) por sus actos heroicos más allá del deber, etcétera, en la batalla del Ponte Grande.

Consejo


Es recomendable limpiar las gafas cuando uno comienza a ver el mundo sucio y gris.

Pan para hoy, hambre para mañana




AXA Real State, con la intercesión de Jones Lang LaSalle, ha adquirido 80.000 metros cuadrados de superficie sobre rasante y 30.000 bajo rasante en la que se ha calificado como la mayor operación de inversión inmobiliaria de una cartera de edificios en el mercado de oficinas de Barcelona (sic). AXA Real State ha comprado todo eso por 172 millones de euros. El vendedor ha rebajado el precio de los inmuebles un 22% sobre el precio inicial y ha asegurado una rentabilidad de la operación del 10% para AXA Real State en el peor de los casos.

Porque AXA Real State compra los inmuebles por 172 millones con la garantía de cobrar un alquiler anual de 16 millones y cuarto durante veinte años.

El vendedor ha sido la Generalidad de Cataluña. Ha hecho un negocio redondo, fíjense. Ha vendido a bajo precio lo que compró a muy alto precio y la operación le ha salido tan cara como pedir un préstamo a veinte años al 9,45% anual de interés. Finalizado el plazo, la Generalidad de Cataluña habrá pagado 325,2 millones de euros y tendrá que buscarse nuevas oficinas, con el coste que ello supondrá.

Eso no es todo. 45 de esos 172 millones de euros se destinarán a cancelar los pagos pendientes de los edificios en venta. Quedarán 127 millones de euros de beneficio (sic) que se habrán evaporado después de ocho años de pagar el alquiler.

El artífice del negocio, saludando.

El señor Mas-Collell dice que esto es reducir el endeudamiento, y este concepto de reducción de la deuda es el que nos ayuda a explicar muchas cosas.

Los edificios son las dependencias de la Consejería de Justicia y la sede de la Agència de l'Habitatge de Catalunya (Agencia de la Vivienda de Cataluña), de la calle Aragón; la Consejería de Enseñanza, en la Via Augusta; la Consejería de Agricultura, Ganadería, Pesca, Alimentación y Medio Natural, en la Gran Via; la Consejería de Justícia, en la calle Pau Claris; la sede del Instituto de Estadística de Catalunya (Idescat), en Via Laietana; la sede del Institut Català de les Dones (ICD, Instituto Catalán de la Mujer), en la plaza Pere Coromines; la Subdirección General de Autorizaciones Iniciales de Empleo, en la calle Puig i Xoriguer; y finalmente, la Oficina de Atención Ciudadana (OAC) de los Servicios Territoriales de Empresa y Empleo en Barcelona, los de la calle Carrera, a los que añadir la Oficina de Empleo en la calle Doctor Joaquim Pou, en el barrio gótico; la sede de la Dirección General de Política Lingüística, en el Portal de Santa Madrona; el Archivo Judicial Territorial de Barcelona, en la calle Roger de Flor, y la sede del Institut Obert de Catalunya (IOC), en la Avenida Paral·lel.

Gomas patrióticas


Es prácticamente imposible vivir en Cataluña sin la tabarra y la murga de las banderas. Qué horror. Te las encuentras hasta en la sopa. Como si no hubiera asuntos más importantes y urgentes sobre la mesa, digo yo.

Menos mal que, de vez en cuando, uno se ríe con la exhibición patria. Porque en Cataluña se cumple día sí y día también la ley de Poe, que sostiene que es difícil o imposible distinguir entre una postura política (o religiosa) extrema y la parodia de esa misma postura.

Así llegamos a lo último de la Joventut Nacionalista de Catalunya (JNC), que es la rama joven de Convergència Democràtica de Catalunya (CDC). Prueba de ello es que su presidenta tiene treinta años, y no es broma.

Se supone que la JNC es a CiU lo que el Frente de Juventudes al Movimiento, pero su presidenta hace tiempo que ya no es una adolescente cumbayá y nadie presta atención a lo crecidita que está. Pero uno es joven hasta que se muere, como dice el poeta, y si tiene treinta años y les va bien, pues qué quieren que les diga, qué le vamos a hacer.

A lo que íbamos. Con todo el derecho del mundo, y bien que hace, si cree en ello, la JNC se manifiesta partidaria de la secesión de Cataluña. Se suma a la tabarra y la murga nacional de sus mayores con el frenesí y el fanatismo de la juventud, y de este latazo surge la iniciativa que me ha despertado la risa.

Sergi Sarri (26 años), coordinador de la JNC en Barcelona, ha presentado una campaña que pretende (traduzco literalmente) fortalecer a los miembros independentistas de la organización.

Lo de miembros tiene su gracia, porque la JNC de Barcelona piensa repartir 700 preservativos con el lema Jo, Catalunya (Yo, Cataluña) en el barrio de Gràcia y así (vuelvo a citar) ampliar el apoyo social al proceso, que es el proceso que llaman de transición nacional. El señor Sarri sostiente que las gomitas servirán para difundir el mensaje patriótico (cito) de una manera más desenfadada, de tú a tú, rompiendo moldes. Luego añade que aprovecharán el reparto de gomitas para ligar... perdón, para explicar a los jóvenes por qué Cataluña necesita dotarse de las herramientas de un Estado.

La verdad es que andar con el discurso de fortalecer a los miembros y dotarse de las herramientas mientras se reparten gomitas tiene su gracia.

Pero uno se pregunta enseguida si andar con el pito cubierto de un látex que diga Yo, Cataluña no será como andar por ahí diciendo (y perdonen ustedes) que yo me follo a la tal Cataluña. ¡Qué grosería! Luego ¿hasta qué punto hay que tomar precauciones follando con Cataluña? A ver si no será tan santa y pura como dicen.

Aunque quizá sea al revés. Fíjense en nuestros líderes patrios, que nos están follando la sanidad y la escuela pública y se forran a nuestra salud dándonos todo el día por el culo. Tanto es así que lo más conveniente es que empleen un preservativo que nos recuerde quién nos está sodomizando día sí y día también. ¿Era ésta la intención de la JNC? ¡No creo!

Los verdes, en cambio, han optado por preservativos reciclables.

A poco que uno siga pensando, aparecen más dudas. La picha patria ¿queda realmente fortalecida por la gomita patriótica? ¿Es el miembro independentista una herramienta del nuevo Estado nacional? El sexo ¿es un buen argumentario político? ¿Sólo hay 700 preservativos para los miembros de la JNC? Es decir ¿son pocos o son más, pero follan poco? ¿Han sido los carcas infiltrados de la UDC los que han reducido el presupuesto de gomitas? Ya puestos, ¿no sería más patriótico prescindir de las gomitas y andar por ahí sembrando la semilla del catalanismo en cuanta hembra se ponga a tiro?

¿El sentimiento patrio es una enfermedad de transmisión sexual? Ergo, ¿es peligroso y poco recomendable transmitir el amor patrio por la vía del fornicio? ¿Corre peligro de unirse para siempre un varón secesionista con una persona unionista si practica el coito sin las debidas protecciones?

¡Ay, cuantas preguntas!

La iniciativa, sin embargo, no es original. La JNC ha copiado la idea del preservatiu independentista, que se presentó en sociedad el pasado día de Sant Jordi (San Jorge), el 23 de abril. Les juro que es verdad.

El condón catalán, tal como se anuncia en su sitio web.

La publicidad del condón catalán (sic) dice (y cito): A partir de ahora, los catalanes independentistas tendrán unas relaciones sexuales cargadas de sentimiento nacional, gracias al preservativo independentista. Pueden saber más en http://www.elcondo.cat/.

Pero tampoco es el primer condón (en) catalán. Véase aquí, por ejemplo.

Ahora, volvamos a enunciar la ley de Poe y comprobemos si se cumple en este país que me vio nacer.

La noche de San Juan


Se insinúa que la fiesta del solsticio de verano es una fiesta pagana de tradición milenaria, aunque las hogueras de San Juan nacieron cuando feneció la Edad Media, no antes. Qué más da. Es noche de jolgorio y jarana.

Para celebrarla, desde tiempo inmemorial, ceno con unos amigos que veo de uvas a peras y la verdad sea dicha, me lo paso muy bien. Lo mejor es andar tirando petardos bien entrada la noche. Se desata la vena criminal que uno lleva dentro, esa fiebre pirotécnica y piromaníaca que las convenciones sociales al uso me impiden manifestar.

Un niño descubrió que las alcantarillas son cañón y amplificador de petardos y gastó pólvoras en el espanto de ratas, quemando truenos que sonaban como campanas de bronce, graves y lejanas, conmovedoras, hasta que uno que aliviaba su necesidad se vio importunado por tan agitadas novedades. La grita que siguió puso al personal en fuga y apagó el bramar de cañones urbanos.


Ortega en Berlín


Paisaje berlinés.

La Generalidad de Cataluña tiene una delegación en Berlín, eso que familiarmente llaman una embajada. Se creó en 2008. Está en Charlottenstrasse, 18, en el distrito postal D-10117, tocando al Check Point Charlie, en lo que hoy es zona pija. Las oficinas miden casi 290 metros cuadrados y salen por 60.000 euros al año (datos de 2010). Tiene teléfono (00 49 30 208 86 430) y fax (00 49 30 554 89 104), hasta un correo electrónico (deutschland@gencat.cat) y una dirección en internet (http://www.gencat.cat/alemanya). Es, pues, una oficina moderna, a la última.

A nadie se le escapa que la delegación en Berlín es muy importante: Alemania es una potencia económica de primera categoría y los contactos de la Generalidad de Cataluña con los países del Este se llevan, en su mayor parte, a través de la oficina berlinesa.

En la delegación trabajan la señora delegada (ahora hablaremos de ella), una secretaria de la delegación y un becario. Que no falte el becario, el único que pega sello.

En Charlottenstrasse 18, la delegación comparte oficina con ACC1Ó (director en Berlín, Sr. Joan Tarradellas), con el Instituto Ramon Llull (delegado en Berlín, Sr. Julià Florit) y con el ICEC (delegada en Berlín, Sra. Neus López). Aparte, ACC1Ó tiene otra oficina en Stuttgart y hay una Oficina de Turismo de Cataluña en Frankfurt.

El salario de la delegada en Berlín es imposible de descubrir en el sitio web de la Generalidad de Cataluña, pero la media salarial de los trabajadores de las delegaciones en el exterior es de 60.000 euros brutos al año más dietas y otros gastos (según el Presupuesto de la Generalidad de Cataluña 2012). El anterior delegado en Berlín se llevaba más de 80.000 euros brutos al año, más dietas y gastos.

La embajada española en Berlín cuenta con 112 trabajadores y ha propuesto en repetidas ocasiones ceder unas oficinas a tantos delegados y directores catalanes, para ahorrar el coste del alquiler de tantas oficinas. En un alarde de generosidad, también han prometido buscar un rincón para el becario, pero el Gobierno de la Generalidad de Cataluña ha rechazado la invitación en repetidas ocasiones.

El primer delegado de la delegación berlinesa fue un periodista, Martí Estruch, que ocupó el asiento el 4 de abril de 2008. El Gobierno de los Mejores decidió prescindir de sus servicios antes de tener que hacerle un contrato laboral y nombró una nueva delegada, doña Mar Ortega Puertas, el 23 de enero de 2012.

Mar Ortega Puertas, sobrina de la licenciada Ortega y delegada en Berlín.

Doña Mar Ortega fue escogida porque, en palabras de la licenciada Ortega, vicepresidenta del Gobierno de la Generalidad, necesitaban un perfil más económico para el cargo. La nueva delegada nació en Barcelona en 1980, se licenció en Derecho y tiene un máster de relaciones internacionales y comercio exterior. Ha trabajado un año para el Ministerio de Asuntos Exteriores (una especie de beca) y un año como asistenta de un Eurodiputado. Eso es todo.

Sus virtudes son, según confesó ella misma a un periodista en un cóctel, tener contactos personales, refiriéndose a la licenciada Ortega, naturalmente. El Triangle se enteró y publicó la noticia. En Unió Democràtica de Catalunya (UDC), partido de la licenciada Ortega, cundió cierto mosqueo y llovieron quejas para que se dijera que la nueva delegada en Berlín no había sido nombrada para el cargo por motivos personales, sino con la aquiescencia del partido. De hecho, una pequeña investigación por internet descubre el perfil de doña Mar Ortega seguido de nombrada a propuesta de UDC o una frase parecida. ¿Un concurso-oposición? Nadie sabe qué es eso.

Es decir, dígase alto y claro: doña Mar Ortega no ha sido nombrada delegada en Berlín por su capacidad profesional, sino porque cae bien a la licenciada Ortega y sólo por eso cuenta con el beneplácito del partido.

Esto me pone los pelos de punta, pero lo mejor está por llegar.

Doña Mar Ortega, delegada de la Generalidad de Cataluña en Berlín, ¡no habla alemán! Así lo declara la comunidad catalana en Berlín y así lo comunican El Triangle y otros periódicos. Repito: no habla alemán.

Doña Mar Ortega se defiende y dice que no hay para tanto. Ya que insisten, se apuntará a un cursillo intensivo de alemán (todavía no lo ha hecho), aunque no lo necesite (sic). Porque sostiene que conocer el idioma no es imprescindible (sic) y su argumento no admite discusión: Yo estoy aquí para ayudar a los catalanes que vienen a Alemania, y éstos hablan catalán.

Elementos para el debate


Transcripción al pedeefe del documento en cuestión.

Como todo el mundo habla y habla, pero nadie sabe de qué, les envío el enlace del documento que ha iniciado la polémica, para que lo lean, lo mediten, lo critiquen y opinen en consecuencia.

En:

Efectos secundarios: Es un poderoso somnífero. Tiene que saber que el consumo de pedeefes puede crear adicción. Consulte al farmacéutico, pero no haga caso de los correveidiles. Puede generar opinión propia.

Mentirosos y de derechas



Somos mentirosos. Cuando nos preguntan, mentimos. El Centro de Estudios de Opinión (CEO) de la Generalidad de Cataluña hace una encuesta para pedir nuestra opinión y en vez de responder lo que pensamos, respondemos lo que creemos que el encuestador quiere oír.

Bah, esto no es nada nuevo. Al contrario, las personas se comportan siempre así y los que se dedican a las encuestas lo saben. En Cataluña y en Pernambuco, todos mienten. Por eso se hacen preguntas tramposas. Si le preguntan a quién votaría usted, luego le preguntarán a quién votó antes. Nunca coincide lo que la gente dice que votó con lo que votó realmente. A partir de éste y otros datos, se procede a la cocina (en argot).

En la cocina se manipulan los datos para obtener un resultado. Si hay políticos o intereses económicos por medio, tendremos mala cocina. Si el cocinero puede trabajar con los medios adecuados, saldrán platos excelentes.

Pero la cocina del CEO es de las que pone los pelos de punta. Hay demasiada gente en la cocina que no pide conocer lo que piensa el público, sino demostrar que piensa como ellos quieren que piense. Así, la predicción de la Mayoría Excepcional fue del CEO, y no diré más.

Pero hay un punto que no sé si es mentira o confusión. A mí me tiene mosca y se repite desde hace ya algunos años. Los catalanes se declaran de izquierdas. Cada vez, más de izquierdas.
Cuando en 2010 CiU ganó las elecciones y habría sumado con el PP una mayoría más que absoluta, los catalanes se habían declarado, de media, un poco más a la izquierda que el centro izquierda. ¡Por eso votaban a CiU-PP! Ya saben, dos partidos de reconocido izquierdismo.

Hoy, la media entre izquierda y derecha en Cataluña ha abandonado el centro izquierda y reposa directamente en la izquierda. Un 39% de los catalanes se sitúan más allá del centro izquierda, hacia la izquierda. Casi, casi, la Unión Soviética, puestos a exagerar. Pese a todo, la suma de intención de voto de CiU y PP dobla o más que dobla el total de catalanes que se declaran de centro, centro derecha, derecha o extrema derecha. Lo dicho: ¡CiU y PP son de izquierdas y no lo sabíamos!

A la hora de calificar a los partidos políticos, los catalanes aseguran que ERC es el partido situado más a la izquierda de todos. Es casi bolchevique. Como es bien sabido, ERC apoya los recortes sociales, al desmantelamiento de la sanidad pública, etc. Su programa de política económica es claramente neoliberal, léanlo. Pero gracias a esta política, ERC es considerado un partido muy de izquierdas y todos tienen que compararse con él. A su derecha, los catalanes sitúan la CUP. Luego andan a la greña, en la zona del centroizquierdismo muy moderado, IC-V y PSC. Sigue CiU, que es de derechas por muy poco. Luego, Ciutadans (C's), y finalmente, claramente en la zona de la derecha, el PP.

Marx, a decir de los catalanes, es el padre filosófico de la derecha, al manifestar que el nacionalismo es un aparato ideológico de la burguesía para desviar la atención del pueblo de sus justas reivindicaciones sociales.

Si uno toma la encuesta del CEO y la cruza con otras, descubre que es creencia popular que cuanto más catalanista es uno, más de izquierdas resulta ser. No ser nacionalista catalán es de derechas. Clamar Proletarios del mundo ¡uníos!, gritar ¡Abajo las naciones! y cantar La Internacional son, para el catalán medio, actividades propias de la extrema derecha.

Volviendo a la encuesta del CEO se da el caso, fíjense, que la clase alta, la media alta y parte de la clase media se consideran mayoritariamente de izquierda o centro izquierda. El catalán de pueblo, ése que reside en un medio rural alejado de la civilización, conservador y tradicionalista hasta la médula, de abuelo carlista, padre franquista y carné de CiU o ERC, también se considera de izquierdas o muy de izquierdas. Lo que queda, que es la otra parte de la clase media y el proletariado urbano es considerado, claramente, de derechas.

A los datos me remito.
 

Primera aproximación a la sexualidad de Caravaggio


Marta y María Magdalena.
En verdad, Anna Bianchini (izquierda) y Filis Melandroni (derecha).

El tema da para mucho. Para tanto da que sólo daré un apunte, para que comiencen a investigar ustedes. Más adelante, si me animo o si despierto su interés, publicaré más apuntes sobre el mismo tema.

Cecco, ebrio e impúdico.

Dicen que Michelangelo Merisi de Caravaggio era homosexual. Algunos de sus lienzos se han convertido en iconos de la cultura gay y se anuncian como pruebas de su orientación sexual. Creen que fue el amante de su amigo y aprendiz, Mario Minniti, de Montoya, el castrado español que cantaba para el cardenal del Monte, incluso del mismísimo cardenal, que los últimos años de su vida, más chocho que en su sitio, mandaba traer niños desnudos y se masturbaba después de contemplarlos un buen rato, y perdonen lo dicho.

Pero también dicen que Michelangelo Merisi de Caravaggio era un mujeriego de mucho cuidado y se ha llegado a sostener que se ganaba la vida como chulo de putas en Roma (sic). Anna Bianchini, Lena Antognetti o Filis Melandroni son algunas de las prostitutas que se cruzaron en su vida. Hay quien llega a decir que tal o cual niño (especialmente, el hijo de Lena o el de Annuccia) nació de su semilla y que la riña que acabó en homicidio y exilio fue un asunto de cuernos con hembra de por medio.

También dicen que se cepillaba niños, el más famoso de los cuáles sería Cecco (Francesco), que luego sería pintor y conocido como Cecco de Caravaggio. Si no saben quién es, busque el cuadro Amor Vincit Omnia (o Amor Omnia Vincit), que se puede ver en Berlín, en los libros o en internet, y verán a Cecco ebrio y desnudo, en posición francamente impúdica.

En fin, que los que sostienen una cosa y los que sostienen otra se estiran de los cabellos y se dan de bofetadas por naderías, porque ¿qué más da que fuera esto, lo otro o lo de más allá? Esa pregunta me la formuló en su día la doctora Solanilla (autora de un interesante ensayo sobre La Muerte de la Virgen de Caravaggio) y no puedo estar más de acuerdo con ella.

Pero ¡qué polémica!

Y eso que es relativamente nueva. Cuando Longhi (re)descubrió a Caravaggio en los años 40 y 50 del siglo XX, no se preocupó ni lo más mínimo de su sexualidad. Tenía delante de sí una obra magnífica e impresionante y un pintor que había influido en generaciones de pintores y que, por muy extraño que pueda parecer, había caído en el olvido y era desconocido del gran público.

Friedlaender, que fue el primero en destacar la ideología de su obra y la relacionó con los movimientos religiosos iniciados por Borromeo, Neri o Ignacio de Loyola, pasa de puntillas sobre este asunto. Con todo, uno no ha leído nada sobre Caravaggio si no ha leído a Friedlaender.

Pero los seguidores de Freud no podían quedar satisfechos con la constatación de vérselas con uno de los grandes maestros (Longhi) ni con la tesis de vérselas con un Caravaggio intelectual y filosóficamente muy culto (Friedlaender). Así que se preguntaron por el sexo del fulano y allá se lió gorda.

Montoya, el castrado, posó en el cuadro más gay de Caravaggio.
Una pista: Lo interesante es la letra de la canción que interpreta.

Los primeros en cuestionar que Caravaggio fuera un machote fueron los historiadores anglosajones. Aparte de sufrir un empacho de Freud, tenían sus razones, algunas de sus hipótesis pueden considerarse sólidas y razón no les falta en muchas de sus observaciones.

A modo de ejemplo, una gran biografía de Caravaggio, M, el enigma de Caravaggio, de Robb, presenta un personaje que es el resultado de una homosexualidad oprimida y reprimida por la Iglesia y la superstición católicas. Recomiendo M, porque es una gran biografía que se lee estupendamente bien, pero la tesis de Robb (que no es original, pues la toma de otros historiadores) fue rápidamente contestada por los historiadores italianos. Uno de ellos, Castellotti, por citar alguno, que habla de la paradoja de Caravaggio, tan católico y tan metido en líos por machote, ya ven.

Es muy curioso señalar que los italianos (no todos) se inclinan a negar la homosexualidad de Caravaggio mientras que son los anglosajones (no todos) los que sostienen que era en verdad gay. Este debate lo carga el diablo, porque va uno y lo inicia y al momento andan todos a gritos y echándose los trastos a la cabeza. Se lo toman muy en serio.

Las mujeres, en cambio, no. Helen Langdon, por citar una, se pregunta sobre la sexualidad del pintor, pero se limita a mostrar los hechos y los documentos contemporáneos. Acepta que fuera mujeriego, acepta que también practicara la sodomía con varones o niños, le da algunas vueltas al asunto y acaba sin darle demasiada importancia. Como la señora Langdon es una de las mejores caravaggistas del mundo, hay que morderse la lengua, porque esa mujer puede decir lo que le dé la gana y cuidado con llevarle la contraria.

Una de las dificultades a las que uno se enfrenta en esta clase de debates es que lo que nosotros tomamos por homosexualidad no era tal a ojos de un romano de finales del siglo XVI y principios del XVII, y lo que nosotros consideramos escandaloso, no lo era para ese mismo romano. Y viceversa. No diré más, que es muy largo de explicar.

Yo, después de leer mucho sobre Caravaggio, formulé una hipótesis particular que sostiene que Caravaggio no era ni hetero ni homo ni bi ni no sé qué sexual, sino que se cepillaba todo lo que se le ponía por delante, persona, animal o cosa, que si le daba por ahí no tenía freno ni manías, el tipo.

Qué sorpresa cuando leyendo la última biografía de Caravaggio de moda, la de Graham-Dixon, muy interesante, éste sostiene que tenemos que quitarnos de la cabeza la idea de un Caravaggio homosexual. Era omnisexual, dice, queriendo decir con ello lo que había pensado yo por mi cuenta antes de leer nada de Graham-Dixon. La palabra omnisexual es... en fin, bastante definitoria.
 

James Gandolfini (1961-2013)



Su madre era napolitana y su padre, parmesano. Vivían en Nueva Jersey, eran católicos, hablaban italiano en casa, vivían modestamente y tenían un hijo, James, que les salió actor. Comenzó en el teatro, en Broadway, pero saltó al cine. Hizo casi siempre papeles de mafioso (alguna vez ruso, casi siempre italiano) hasta que acabó en una serie de la HBO para televisión, The Soprano. Eso fue en 1999.

James Gandolfini se convirtió en Tony Soprano, un mafioso de Nueva Jersey con problemas emocionales, padre de familia y gángster. Una de las mejores series de televisión de la historia (si no la mejor) lo encumbró hasta lo más alto y lo convirtió en un icono de la pequeña pantalla.

Ayer, en Roma, murió. Un infarto, dicen. Que descanse en paz.

El escándalo Padrosa



En 2010, el gasto sanitario público por catalán y año era de unos 1.300 euros. Catorce Comunidades Autónomas tenían un gasto superior por habitante y año. En la Unión Europea (toda ella), la media era superior a los 1.600.

Gracias al ímprobo esfuerzo y tesón de don Artur Mas y su Gobierno de los Mejores, eso cambió. El gasto sanitario público por catalán y año hoy mismo apenas supera los 1.000 euros, las listas de espera se han incrementado un 51% en dos años y los sindicatos médicos denuncian esperas de cinco años o más en determinadas intervenciones quirúrgicas.

Además del presidente Mas, uno de los máximos responsables de esta política de tan meritorios resultados es don Baudilio, a. Bío Ruiz, consejero de Salud. El señor Mas considera un proyecto personal convertir la sanidad pública en Cataluña en un merendero de empresas privadas (y privatizadas) y escogió a don Baudilio con nocturnidad, premeditación y alevosía. Se dejó aconsejar por el señor Prat, uno de sus asesores personales, un sinvergüenza notable, hoy imputadísimo, y por otros empresarios (que no médicos) que hacían su agosto con los hospitales concertados y el carné de CiU.

El Trío Lalalá. Los máximos gestores de la sanidad pública catalana.
Don Baudilio, Padrosa y Prat.

Don Baudilio era, recuerden, el presidente de la Unión Hospitalaria. Que se entienda: el representante máximo de la sanidad privada en Cataluña. Así lo nombraron consejero, así comenzó a instalar a su alrededor cargos, cargos y más cargos procedentes del sector privado que tenían y siguen teniendo como principal misión la de recortar, trocear y privatizar lo poco que queda de la sanidad pública catalana.

Uno de los cargos de confianza de don Baudilio, que él escogió y mantiene todavía, ha sido (y sigue siendo) don Josep Maria Padrosa, el director del Servicio Catalán de la Salud (CatSalut) y poseedor de un carné de CiU. Procedía de ostentar algunos cargos relacionados con la inspección sanitaria en Gerona, que ejercía siendo director general de una empresa privada del sector sanitario (sic). Era muy conocido y apreciado entre sus empleados por su acritud, su despotismo y su particular visión de lo que tiene que ser la inspección sanitaria, que quizá no coincida con la nuestra. A las víctimas de su gestión me remito.

Ahora El País denuncia que don Josep Maria Padrosa, desde enero de 2011, era a la vez director del CatSalut y apoderado de seis empresas privadas que facturaban a CatSalut más de 14 millones de euros. El País va más lejos. Mientras la mayoría de las empresas proveedoras del CatSalut han visto mermar en un 20% o más sus ingresos, las del señor Padrosa apenas un 9% y sólo el primer año. Todo parece indicar que han recibido un trato de favor.

Cuidado con Padrosa, que no es un don nadie. El CatSalut que dirige financia los hospitales, ambulatorios, ambulancias, centros de salud, etc., concertados en Cataluña. Eso es tanto como decir que el 97,9% del gasto del sistema sanitario catalán pasa por sus manos.

Es un problema. Todo señala hacia una dirección: el director del CatSalut es un déspota con patente de corso, protegido por CiU y el lobby empresarial sanitario catalán, que obtiene beneficios para sí de empresas que él mismo contrata para que hagan un servicio público. No será el único, porque el el sistema de sanidad público catalán depende fortísimamente de centros concertados, en su mayoría de gestión o propiedad semipública, medio privatizados, que ponen fácil esta clase de chanchullos.

Es tan compleja la red de intereses y sociedades que la gestión del CatSalut es por definición ineficiente. Si una persona honesta y honrada tendría problemas para controlar y combatir la corrupción en una sanidad tan atomizada y en manos de tanta gente, uno como Padrosa... En fin, no les cuento.

En 2012, el CatSalut gestionó más de 8.500 millones de euros. En 2010 habían sido más de 10.200 millones. Como pueden ver, el señor Padrosa no ha tenido ningún reparo en recortar el gasto sanitario en más de un 20%. Pero en honor a la verdad, no lo ha hecho indiscriminadamente, como creíamos, sin criterio ni cuidado. Al contrario, todo lo contrario. Ha procurado no recortar o recortar muy poco los contratos de los que él mismo, en persona, obtenía beneficios económicos.

Yo no quiero que dimita el señor Padrosa. Yo quiero que lo cesen.

Inmediatamente.

Más en las noticias en El País:

En la Plataforma de Afectados por los Recortes Sanitarios (PARS)

Y para echarse a reír, por no llorar, en:

Al final, no condenamos el terrorismo


En el Parlamento de Cataluña se votan cosas. Algunas veces, se votan declaraciones. Una declaración no es más que la manifestación de una opinión de los delegados de los ciudadanos catalanes, los señores diputados. Como son los que gestionan el Estado, por delegación, se considera importante lo que puedan opinar.

Las declaraciones son muy variadas. El pasado 10 de marzo, por ejemplo, el Parlamento de Cataluña hizo una Declaración sobre el Año Internacional de la Estadística (en catalán). El 22 de mayo hizo una con motivo del Día Internacional contra la Homofobia, la Lesbofobia y la Transfobia, que, por cierto, había sido el 17 de mayo y llegó con retraso. Aquí la tienen (otra vez en catalán).

Aquí tienen un enlace para poder leer todas las declaraciones institucionales del Parlamento de Cataluña, en:

Verán que las hay muy curiosas.

La del 10 de marzo de 2011 la presentó Ciutadans (C's, en argot). Pese a ello, todos los diputados y todos los grupos parlamentarios la apoyaron, de manera unánime. Todos votaron a favor de la Declaración del Parlamento de Cataluña de apoyo a las víctimas del terrorismo.

La fecha no había sido escogida al azar. El Parlamento Europeo había declarado el 11 de marzo Día Europeo en Recuerdo de las Víctimas del Terrorismo, en homenaje a las víctimas de los brutales atentados islamistas del 11 de marzo de 2004 en Madrid.

Hace un año, a petición de la Asociación Catalana de Victimas de Organizaciones Terroristas, el Parlamento de Cataluña organizó un acto de homenaje y recuerdo. Pueden leerlo aquí mismo. Asistieron representantes de todos los grupos parlamentarios, excepto CiU (sic), porque no lo creyó oportuno, ya que asistía la consejera de Justicia del Gobierno de la Generalidad de Cataluña y como era de CiU, pues ya valía para representar al partido y para representar al grupo parlamentario. Dos en uno. Aunque no fuera diputada.

La fecha ocultaba un macabro significado. Se cumplían 25 años del atentado de ETA más sangriento de todos, que fue en Barcelona: el atentado de Hipercor.

Un niño, víctima del atentado de Hipercor.

Un viernes, a primera hora de la tarde, los asesinos aparcaron un Ford Sierra en el aparcamiento subterráneo de Hipercor, en la avenida Meridiana de Barcelona. La tienda estaba llena a rebosar. Los miembros del comando Barcelona de ETA (Josefa Ernaga, Domingo Troitiño y Rafael Caride Simón) habían preparado un potente artefacto explosivo-incendiario. 30 kg de amonal prenderían fuego a casi 200 kg de gasolina, escamas de jabón y pegamento, una mezcla incendiaria con gran poder de deflagración, que alcanza los 3.000 ºC, se engancha a la piel, no se apaga con agua fácilmente y genera una gran cantidad de gases tóxicos. Estaba diseñado para matar gente sin dañar demasiado las estructuras. A las cuatro y diez de la tarde, estalló.

Provocó un socavón de 5 m de diámetro en el establecimiento comercial, por donde penetró una bola de fuego que prendió todo. Pocas víctimas murieron en el acto. Las 21 personas asesinadas fallecieron en su mayor parte en los hospitales, días después, víctimas de horribles quemaduras. Entre ellas, cuatro niñas menores de 15 años y doce mujeres. Quedaron malheridas 45 personas más, que sumaron meses de hospitalización cada una de ellas.

El poder de la deflagración de la bomba y su capacidad incendiaria fueron pavorosos.

Aunque la policía actuó con negligencia (así quedó probado), los asesinos tenían intención de matar y nombre y apellidos. Los pillaron. Ellos son los responsables de la matanza, ellos personalmente. Pero también tienen nombre y apellidos las personas que mataron o mutilaron esos hijos de perra. Todas las víctimas eran catalanas, pero eso, en el fondo, no importa, no importa en absoluto.

Los bomberos y los servicios sanitarios salvaron a muchas personas.

Dicho esto, volvamos a las declaraciones parlamentarias. Ciutadans (C's) vuelve a presentar una propuesta de declaración, idéntica a la que había aprobado el Parlamento de Cataluña el 10 de marzo de 2011, este pasado 11 de junio.

No, mentira. No es idéntica. Existen tres diferencias esenciales. A saber:

Una, cuando dice (copio) El Parlamento de Cataluña, con motivo de la conmemoración del 26.º aniversario para las víctimas del atentado terrorista en Hipercor, quiere rendir homenaje a todas las víctimas del terrorismo. En la del 10 de marzo de 2011 recordaba los atentados de los trenes en Madrid.

Dos, cuando añade que (copio) los ciudadanos de Cataluña, a través de sus representantes, quieren renovar la condena a cualquier acto de terrorismo o enaltecimiento de los terroristas y rechazan cualquier intento de equiparación moral o política entre las víctimas y sus verdugos. El rechazo a la equiparación moral no aparecía en la del 10 de marzo de 2011, pero es un rechazo que (yo) considero justo y fundamentado.

Tres, una propuesta para que el Parlamento de Cataluña tenga un recuerdo cada año para las víctimas del terrorismo, y que esa conmemoración sea el 11 de marzo, ya que es el día que la Unión Europea reserva para tal fin. Puesto que la declaración del 10 de marzo de 2011 había sido unánime y en los actos de hace un año habían asistido todos los grupos parlamentarios (excepto CiU), ¿por qué no convertir esta condena del terror y este apoyo a las víctimas en un acto de carácter anual?

Sus razones tendrán, cada uno las propias, pero ERC, IC-V y la CUP se negaron a votar esta declaración. Luego, tanto CiU como el PSC se sumaron al no. Si no votan todos, nosotros no votamos, dijeron. Yo, qué quieren que les diga, creo que ésta, precisamente ésta, es una razón más bien imbécil. Uno está de acuerdo con la declaración o no lo está y vota en consecuencia. El PP, en fin, votó a favor, y sus razones también las tendrá, se supone.

La declaración ha sido apoyada por 28 diputados y rechazada por 107. Todos tienen nombre y apellidos y cada uno será responsable de sus actos, se supone.

Creo que este asunto va más allá de ser de izquierdas o de derechas o de rendir pleitesía a una u otra patria. Condenar a los criminales y ponerse al lado de las víctimas ¿qué tiene de malo?

Siento asco y desamparo.